SEMANA 4 - RESUMEN CAPITULO III

 CAPITULO III

EL GRAN OLVIDO

Mi palpito era correcto. Había pasado algo realmente extraño.

En la noche mi mamá llamó. Me saludó un ratito y luego habló con mi papá. Contó algo casi imposible de creer. La Abuela, quien había vivido tantos años en ese mismo sitio, salió a caminar por el campo y se perdió.

- ¡Si ella lo conocía como la palma de su mano!. Llegaron las 7 de la noche y no apareció. Nos tocó ir a buscarla con linternas.

-¿Dónde estaba? - preguntó mi papá.

La encontramos como a un kilómetro, en un matorral, aterida de frío. Entonces acordaron que la traerían a esta ciudad para hacerla ver de médicos especialistas en esa enfermedad que en tan poco tiempo la estaba dejando sin memoria.

-Si la enfermedad va rápido, también nosotros debemos apurarnos - me explicó mi papá.

-Exactamente, ¿Dónde está mi mamá? Quería saberlo con toda precisión pues me encantan los mapas. Traje mi gruesa Geografía. Busqué una y otra vez y no fue posible hallar el pueblo donde vive mi abuela.

-El sitio es tan pequeño que no aparece en tu libro - dijo mi papá.

Entonces nos fuimos a buscarlo en el inmenso mapa en relieve, que ocupa toda una pared en el estudio de la casa. Eran muchas montañas blancas juntas, sobresalía desde lejos. Al fin, pude ver el pueblito que estaba perdido entre otros cien.

-¿Cómo es ese sitio? - le pregunté.

-Es un lugar bellísimo, de gente amable. Allí nació tu mamá.

-Me gustaría conocerlo algún día. - Le dije.

Entonces mi papá se acordó de algo interesante. Me contó que yo había estado allí cuando tenía casi dos años, pero de esa época no recuerdo nada.

-Ese viaje se ve muy largo - Comenté.

-Son casi diez horas por carretera.

-¿Y no la pueden traer en avión? Ante mi pregunta, mi papá se rió. "¿Acaso he dicho algo chistoso?". Entonces él me explicó:

-Es un pueblo abandonado y escondido, el más pequeño de esa región. En toda esa Zona no hay ningún aeropuerto.

Con razón la abuela no había venido más a menudo y nosotros no habíamos vuelto.

Ahora que lo pienso, esa enfermedad explica varias cosas. Para mi cumpleaños ella siempre llamaba por teléfono a saludarme, a mí  me extrañó que del último se olvidó. Y para Navidades siempre me enviaba un regalito, pero el año pasado no lo hizo.






Comentarios

Entradas más populares de este blog

SEMANA 4 - RESUMEN LIBRO - MATILDE Y EL LADRÓN DE RECUERDOS - CAPITULO I

SEMANA 4 RESUMEN - CAPITULO II